jueves, 31 de mayo de 2018

Tips para cuidar a nuestras mascotas de las altas temperaturas

 

Exponer a las mascotas a las altas temperaturas del verano les puede provocar un grave golpe de calor. 

Cambiar frecuentemente el agua y no dar paseos en horas calurosas son algunas de las recomendaciones que te entregamos para cuidar a tu mascota y disfrutar con ella.

Al igual que los humanos, los perros y gatos sufren con el calor que hace en el verano. Con temperaturas por sobre los 30 grados, las mascotas están expuestas a sufrir varias lesiones y enfermedades por el calor. Incluso, si no se toman los cuidados adecuados, el animal puede experimentar un shock térmico que podría ser mortal.  
A pesar de que la temperatura de los perros y gatos sólo supera en un grado aproximadamente la temperatura humana, tienen factores que los hacen ser especialmente vulnerables frente al calor. El pelo tupido, la piel rosada y otras características físicas de algunas razas pueden contribuir a ocasionar daños severos en las mascotas.
Conoce acá algunos sencillos consejos para cuidar a tu mascota del calor y evitar que comprometa su salud.

GOLPE DE CALOR

El principal riesgo que corren las mascotas en verano es sufrir un golpe de calor. Según la Veterinaria de Royal Canin, Francisca Montero, el golpe de calor “es un shock término donde el organismo sube de temperatura en forma muy brusca y el cuerpo no alcanza a adaptarse a esta temperatura”. 
El golpe de calor puede ocurrir al dejar al perro o gato en un lugar con mucho sol o calor, como una bodega o un patio cerrado. Sin embargo, Montero asegura que “lo más clásico es cuando la gente deja a sus mascotas adentro del auto”. 
“Bastarían unos minutos para que ocurra este golpe de calor porque la temperatura de un auto puede subir varios grados muy rápidamente”, dice. 

SÍNTOMAS DE UN SHOCK TÉRMICO

Según la doctora, “los signos de cualquier mascota pueden ser pérdida de conciencia, un jadeo muy excesivo, depresión, que el perro está no tan alerta como siempre, va a tener la piel, la nariz y la lengua mucho más seca. Pero lo más probable es que pierda la conciencia, incluso puede acabar en la muerte”. 
De esta manera, explica que si nuestra mascota sufre un shock de este tipo, hay que llevarla inmediatamente a un médico veterinario.
Además, si “tengo agua disponible hay que aplicarla en los pliegues, en las axilas, en el estómago, y en lugares donde puedo tratar de bajar al temperatura”.

ANIMALES MÁS PROPENSOS A SUFRIR UN GOLPE DE CALOR

Si bien Francisca Montero afirma que cualquier raza de perro o gato puede sufrir un golpe de calor si no se toman las precauciones adecuadas, hay algunas que pueden ser más propensas por sus características físicas.
Los perros braquicéfalos o que tienen un hocico más corto como los buldogs o los bóxer, son más propensos a sufrir un shock térmico ya que tienen mayor dificultad para respirar. 
Asimismo, los perros o gatos de pelo muy largo o tupido, especialmente las razas con doble capa de pelo como los akita, también están dentro de las razas más vulnerables al calor. 
En tanto, “la población canina o felina más riesgosa van a ser siempre los cachorros y los geriátricos porque ellos van a tener más dificultad en su metabolismo para regular la temperatura”, explica la veterinaria. 

TIPS PARA CUIDAR A LAS MASCOTAS DEL CALOR

Frente a esto, la doctora entrega una serie de tips o consejos para cuidar a las mascotas de las altas temperaturas: 
 No dejar a las mascotas encerradas en autos o en zonas directamente al sol. Por el contrario, hay que ubicarlas en lugares amplios, con sombra y buena ventilación. 
 Pasear a los perros sólo cuando baja el calor, es decir en la mañana, en la noche o después de las 7 de la tarde. 
– Asegurarse de que el perro o gato esté siempre bien hidratado. Es necesario cambiar el agua de su plato por lo menos dos veces al día para que esté siempre fresca. También se le puede poner hielo al agua para mantenerla fría. 
– No dejar el alimento todo el día en el plato y ponerlo a la sombra, sobre todo si se trata de alimento húmedo ya que se pueden generar bacterias que infecten al animal.
Asimismo, explica que es importante proteger las almohadillas de los animales para que no se quemen con el cemento o la arena, ya que éstas los ayudan a perder el calor. “Lo mejor es tomar en brazo al perro si es posible en zonas que son riesgosas para sus patitas o llevarlos por la sombra”. 

 

jueves, 10 de mayo de 2018